Mario Costeja no solo ganó su demanda a Google, sino que abrió una ventana para que el resto de los ciudadanos exigieran a la compañía la eliminación de ciertos datos, en base al «derecho al olvido».
Ante la cantidad de peticiones recibidas, la empresa ha creado un formulario para que los interesados pidan que se borre información perjudicial sobre ellos. Desde Posicionamiento Web Valladolid y seosalamanca te contamos un poco más al respecto.
Mucho trabajo pendiente para Google
El fallo del Tribunal Superior de Justicia de la Unión Europea (a favor de Costeja) permite a los usuarios solicitar que se eliminen algunos resultados asociados con su nombre del motor de búsqueda, siempre y cuando sean «inadecuados, no pertinentes o ya no pertinentes, o excesivos desde el punto de vista de los fines para los que fueron tratados».
Las peticiones no se hicieron esperar. La BBC tuvo acceso a información sobre quiénes fueron las primeras personas en solicitar la eliminación de datos; se trató de un hombre involucrado en la política quien, al volverse a presentar en las elecciones, quería que se borraran enlaces de artículos en los que se hablaba de su anterior mandato. También se conoció el caso de un pederasta, exigiendo que se eliminara del buscador, las páginas donde se hablaba del caso, al igual que un médico, ansioso para que desaparecieran comentarios negativos en algún foro sobre sus servicios.
Google habilitó un formulario de solicitud de retirada de resultados, en los cuales el «afectado» debe incluir su nombre, dirección de contacto y los enlaces que quiere que se retiren, además del motivo. El equipo de la compañía asegura que cada uno de los casos será estudiado personalmente.
Pero hay dos puntos importantes para debatir: si bien no salir en el motor de búsqueda de Google es muy cercano a «desaparecer», los datos sobre la persona en cuestión continuarán en las páginas donde se encuentren subidos.
El otro punto de discusión en foros y blogs es sobre qué realmente debe ser eliminado y qué debe continuar a la vista de todos.
Los empleados de Google ahora tendrán la labor de determinar si la petición realizada es plausible y los enlaces deben salir del motor de búsqueda, pero surgen preguntas sobre qué es de interés general y qué tiene que ser eliminado. Además, se advierte que el envío del formulario no asegura el retiro de los enlaces «conflictivos».
La historia
Costeja demandó a Google cuando descubrió que nunca se zafaría de ser relacionado con una subasta de una casa por impagos. El asunto le trajo problemas, aún muchos años después de haber ocurrido porque era parte de su «historial».
El fallo del Tribunal Europeo marcó un hito. Aunque inicialmente se creía que Costeja tenía la batalla perdida, los responsables del tribunal decidieron que Google procesa y organiza la información, lo que se considera como «tratamiento de datos» y, por lo tanto, tenía plena responsabilidad en lo que se mostraba sobre una persona.
Sin embargo, hay quienes se han querido aprovechar de la decisión para «desaparecer» registros que algunos piensan que deben mantenerse. En Marketing Online Salamanca queremos saber tu opinión al respecto, ¿qué piensas del derecho al olvido?